A vueltas con SkyFall.
No
soy capaz de hacerme un juicio claro de la película. Es un buen thriller, sin duda. Sam Mendes es un magnífico
director, y es capaz de transmitir un aire de melancólica decadencia a todas
sus películas, un aire que casa muy bien con los escenarios (aquellas tierrasaltas de leyenda) de la película. El protagonista es un hombre cansado, más en
la línea del personaje que interpreta Kevin Spacy en American Beatuy, o al
de Tom Hanks en Camino a la
perdición. Estos personajes en el fondo hastiados de la vida que llevan, con
la amargura prendida en el fondo de su alma. Películas de buen guion y bien
resueltas. En este sentido, para quien no haya visto ninguna película de la
saga Bond, se SkyFall es una película de agentes secretos superior a la media.
El
problema, claro, llega porque no es una película de espías. Es una película de James Bond. Y Bond es otra
cosa. Es ese espía elegante, cínico y desacomplejado, que acumula amantes,
disparos y martinis. Es el último refugio de una masculinidad maldita que nunca
llegamos a conocer y cuyos estertores
alcanzamos a ver nomás que en sus películas. Bond será un destroyer con
las mujeres o no será. Sin rasguños en la cara, con sus trajes impolutos. Este
Bond que vuelve a la casa de sus padres y que reflexiona de manera freudiana
acerca de su relación con M
me interesa más bien poco como personaje, la verdad.
Por que ese yo no James Bond.
Y no
sé quien se cree que es Mendes para pegarle este viaje al personaje hasta
dejarlo irreconocible.
PS: John
Hugh MacLennan escribió “Sientes que
nadie más que Dios ha estado nunca allí antes que tú, pero
en un valle desierto de las Highlands sientes también que todos aquellos que un
día importaron están muertos o ya se fueron”
La posdata de su post, me ha recordado un viaje en Diciembre de hace unos años por las Tierras Altas, subiendo por la carretera -por llamarla de alguna manera - que une Ullapool con Durness. Recuerdo con bastante nitidez la sensación de soledad y melancolía, y sobre todo el pensamiento, pero sobre todo me pregunto como se ganan la vida y viven allí ....
ResponderEliminarJames fue al garete desde que le pusieron a esa jefa mal encarada. La puñetera mania de que al macho hay que educarle. Coño, como si a estas alturas de la tortilla fueramos gordos bebecerbezas atados a un sofa. Al final lo han convertido en un castrati depresivo que no interesa a nadie.
ResponderEliminarJoao Pires i Barrio