Magnífica tribuna de Pepe Álvarez Junco en El País el otro día a cuenta de la relación entre "Nacionalismo y dinero". Doy fe de aquella lucha contra el "economicismo vulgar" en la facultad como explicación del nacionalismo. Nosotros somos hijos de Benedict Anderson y de las explicaciones culturales a través de las comunidades imaginadas. Aunque nunca dejamos de sospechar, con Samuel Johnson, que el nacionalismo no es más que el último refugio de los canallas.
No deje de leer el artículo en cualquier caso, desocupado lector.
1 comentario:
Pero también habria que mencionar a los miles de pequenyos beneficarios del nacionalismo: autores y cineastas sin talento viviendo de subvencionas, periodicos subvencionados par decir lo que la Generalidad queria que dijeran, profesores que nunca habrian ganado las oposiciones en buena lid, funcionarios autonomicos contratados con criterios linguisticos y politicos, adjudicaciones en catalan lo que apartaba a las PYMES mesetarias en beneficio de las cfatlanas, sin contar los empleados de las embajaditas y del agit-prop.
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