31.5.19

Lo peor aún no ha llegado

Vienen malos tiempos, aunque pensamos que todo va siempre a mejor. Los años de totalitarismo comunista en Europa del este no fueron en vano. Ni han salido gratis. Hay que leer esto de Anne Applebaum. Orban y toda la extrema derecha polaca son hijos del comunismo. Y de su manera de entender el mundo. Puede sonar paradójico, pero es lo que hay.

1 comentario:

Anónimo dijo...

"Después de que el partido obtuviera una escasa mayoría parlamentaria en 2015, sus líderes violaron la constitución nombrando a nuevos jueces para el tribunal constitucional. Más tarde, utilizó un libreto igualmente inconstitucional para intentar controlar el Tribunal Supremo de Polonia. Se hizo con el control de la televisión pública estatal, Telewizja Polska; despidió a presentadores populares; y empezó a emitir propaganda descarada, espolvoreada de mentiras fácilmente refutables, a costa de los contribuyentes".

Vamos, lo que nuestras "pulcras" democracias occidentales llevan haciendo décadas.