Este mito del mundo que se fue lo tenemos grabado a fuego en lo más profundo de nuestros inconsciente. Claro que la modernidad trae riesgo, porque asumir la ficción de la individualidad exige mucha valentía, pero no creo que la solución sea recrearnos en un pasado que nunca existió. Lo que es relevante es no perder de vista la comunidad: individuos, sí, pero dentro de un entorno.
1.6.24
3.5.23
Entorno de comunidad
Qué importante es tener una comunidad de la que formar parte. Es un derecho, claro, pero eso no significa que el Estado te lo vaya a facilitar, así que procura trabajártelo por ti mismo. Dunbar siempre es interesante, y lo traían el otro día en El Mundo a cuenta justo de este tema: vete al bar a charlar con tus amigos y deja de correr solo como una gallina, atontao´.
7.4.23
Felicidad
De nuevo con el tema, esta vez en XLSemanal. Robert Waldinger, autor de Una buena vida. Y la misma idea de fondo: tener amigos y formar parte de una comunidad alarga la vida. Y la soledad mata. Y mucho.
¡Hay tantas cosa que repensar!
25.2.23
La felicidad
Qué cosas las de la felicidad, en esta entrevista de hace unos meses en El Mundo. Y qué respuesta de Tal Ben-Sahar, a vueltas con Nietzsche: "En 1875 Nietzsche escribió: «Dios ha muerto». Y cuando lo hizo mucha gente dijo: «Oh, entonces hemos ganado la batalla, la ciencia ha ganado la batalla sobre la religión». Pero él, cuando lo escribió, estaba muy afligido, pensaba: «Qué vamos a hacer en un mundo sin dioses». Y lo entiendo. No porque piense que debemos volver a la Edad Media, a la vida dogmática. Sino porque creo que muchas de las cosas buenas de la religión han sido desechadas. Hay muchas cosas buenas y lo estamos perdiendo: por ejemplo, comunidad. Es uno de los primeros indicadores de felicidad."
26.5.06
Comunidad y Sociedad
"[...] nadie debería escribir su vida sin haber tenido la paciencia, antes de fechar su propia existencia, de recordar por lo menos a la mitad de sus abuelos"
Günter Grass. El tambor de hojalata.
28.9.05
Una aldea
El soldado de porcelana. Horacio Vázquez Rial. Pág. 336 de la edición citada.