Las políticas públicas. Aquellas que se construyen para resolver problemas públicos. Unos problemas que también se construyen. Un problema: las fronteras. Una política pública: disolverlas. Ahí está la mi región, con la frontera más pobre de Europa occidental. Las carreteras rayanas desde Zamora a Tras os Montes son demenciales. Prueben a ir por el Río de Honor de mis sueños. O por Calabor. Prueben a buscar asignaturas de portugués en la enseñanza reglada en La Villa. O intercambios de escolares con Braganza. Nada de nada. Pero, eso sí, el (escaso) dinero para estas cosas se va a gastar entre otros sitios también en Valladolid y en León, provincias que están a decenas de quilómetros de la frontera.
Ya puestos, que dejen algo de los fondos mineros para León en Sanabria, no? O algo del dinero de la capitalidad regional. Total, tiene exactamente la misma lógica...
En fin.
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