Hablando de líneas rojas, este gobierno ya ha traspasado la del acoso a la prensa, como denunciaba el otro día Reporteros sin Fronteras, cuyo informe sobre España destaca -como recogía El Mundo el otro día, "la «escandalosa» falta de transparencia en los datos de muertes, las ruedas de prensa telemáticas con preguntas filtradas o la «censura sutil» en la toma de imágenes que permitan a los ciudadanos afrontar la dura realidad de la muerte y el sufrimiento que ha dejado la pandemia en España. Además, la organización ahonda especialmente en «el señalamiento» de periodistas por una parte del Gobierno de coalición: Unidas Podemos.
28.4.21
5.4.20
Lo de la prensa
25.3.20
Ni gobierno, ni prensa
10.3.20
Negrín, ¿Dónde está Chen?
22.3.19
Hilando (prensa)
4.9.17
La prensa durante el Sexenio (II)
Una sociedad, aquella España que no pudo ser, que se urbanizaba y que se incorporaba, cada vez con más fuerza, al debate público y político.
27.9.16
14.2.15
Conceptos
21.3.12
Dos cosas, a cuenta de Matas
El tal Matas. Condenado a prisión. No es el primero, pero quizá sí el más espectacular, porque parece que le van a caer más condenas. La sentencia, también, demoledora. Sólo dos reflexiones. El papel de la prensa. Tres cuartas partes de todo lo que se ha destapado en Baleares ha sido gracias al Mundo y a su edición de allí. Nadie más hablaba de corrupción en las Islas. Era de mal gusto, cosa de españoles. Pero ahí estaban los chicos de Pedrojota, dándole caña a la Munar, a Matas y a todos los que cayeron como una plaga en la vida política de las islas. Hay algo en El Mundo que nunca tendrán ni el abecé ni el país en lo que a lucha contra la corrupción se refiere. Ni desde luego la razón o el tal público. Sin prensa libre no hay Estado de Derecho.
La segunda reflexión. Nadie asume ninguna responsabilidad, más allá de la penal. Alguien puso a Matas ahí hace años. Alguien lo ayudo a trepar, confió en él. Alguien nos lo vendió para que lo votáramos. Alguien lo puso de ministro, alguien lo mandó a los Estados Unidos. Joder, y ahora parece que el tío subió solito hasta la cima.
Nadie se disculpa por ello.
No pido nada más.
Sólo una disculpa.
PS: “Pero nunca hasta ahora, en que se han borrado definitivamente las fronteras entre la cultura culta y popular y han reventado todas las jerarquías sociales y estéticas, la vulgaridad se había convertido en norma suprema de comportamiento”
Gomá, Javier: Ejemplaridad pública. Taurus, Madrid, 2010. Página 66.
27.2.12
Cerrar y perseguir
La noticia, claro, ha pasado desapercibida. Es una muestra, una más, del brutal racismo de nuestra izquierda: cuando los desmanes tienen lugar en Iberoamérica a cargo de sus primos ideológicos, sonríen condescendientes mientras apuran el Martini y miran al horizonte. El tal Correa, un aprendiz de Chávez, un inepto, lleva mucho tiempo persiguiendo la libertad. También la de prensa. Tras una denuncia del presidente, sus jueces títere han puesto una multa exorbitante a un periódico de Guayaquil, El Universo y han intentado meter en la cárcel a su director y a un par de periodistas. Es terrorífico. Así concibe la izquierda caníbal la libertad. Es una vieja herencia, no se les puede culpar sólo a ellos. Por cierto que al fulano este lo ha estado asesorando un ex juez y prevaricador español, un tal Garzón. Qué buenas lecciones le habrá impartido. Es nuestra izquierda y así son sus modelos. Y mientras quizá un periódico de Guayaquil acabe teniendo que echar el cierre, yo recuerdo lo que escribió Arcadi Espada en algún sitio; aquel concepto que leí y memoricé: “un mundo sin mediadores; el sueño de cualquier tirano”.
PS: “Farai un vers de dreyt nien” no es sólo el título de un legendario poema de Guillermo de Aquitania. No. Tampoco es sólo el título de un poema de Luis Alberto de Cuenca. No. Es mucho más.