5.3.16

Mundo rural, mundo olvidado

Tenemos mucho que reflexionar sobre el mundo rural en esta España postmodena y pasada de vueltas en la que parece que todos somos urbanos desde hace siglos. Para ir abriendo boca, Julio Llamazares, el otro día en el país, a vueltas con las Diputaciones:

[...] pero también hay que tener en cuenta que son las únicas instituciones que se ocupan de los problemas del mundo rural, ése tan olvidado por el Estado central y las comunidades autónomas, volcados casi exclusivamente en atender a las grandes áreas urbanas por su mayor rentabilidad política y económica, y de unas circunscripciones, las provincias, que con su desaparición lo único que harían es aumentar la marginación y abandono de sus habitantes, alejados cada vez más de los centros de decisión política.

1 comentario:

Gesualdo dijo...

En España hay, como siempre ha habido, muchos desertores del arado, que parece que nunca vieran una planta crecer fuera de una maceta. Por suerte también hay mucha gente que sabe o recuerda como se vivía en una España menos urbanizada, pero nada de eso tiene que ver con el funcionamiento de la diputaciones provinciales, que han devenido en agencia de colocación en competencia muchas veces con la administración autonómica.

Las actuaciones de las diputaciones que yo conozco se llevan a cabo principalmente en los municipios periféricos de las ciudades, por simple rentabilidad política, y no en los pequeños municipios que están doblemente olvidados, siendo así que la mayoría de las actuaciones en municipios periurbanos podrían ser realizadas por ellos mismos y los pequeños municipios podrían recibir ayuda de la administración autonómica.