12.2.13

La D es muda... (cine)


Estuvimos viendo Django. Ya conté que he tenido durante años un problema con Tarantino, pero al final me he reconciliado con él. Buen cine, con su estilo personal, buena música, mucha violencia y guiones inteligentes. Un magnífico Foxx, que no para de crecer (aún lo recuerdo de Collateral) y un Waltz elegante y, cosa extraña, bien doblado. De fondo, la esclavitud, un tema perverso del que por cierto el mundo anglosajón siempre sale bien parado. Ventajas de contar la historia. Los años sesenta del XIX son antes de ayer en términos históricos. El Perdíu, sin ir más lejos, ya iba buscando charrelas por la Sanabria en aquella época. Al otro lado del océano, entre tanto, seres humanos eran vendidos, y vejados. Sobre todo las mujeres. Hombres que eran tratados como bestias por parte de una élite orgullosamente blanca y protestante. Para que luego vengan tocando los güevos con la leyenda negra y con que los del sur somos unos tarados...

La película es un viaje bien narrado, un viaje hacia la libertad. Un viaje, en el fondo, de vuelta a casa…

¿Hay algo en la narración humana que no sean variaciones del viaje de Ulises?

No hay comentarios: