4.9.15

En carretera (al sur -Portugal-)

Entramos desde Vigo. Y empieza una sorpresa que será común hasta alcanzar Faro: las magníficas autovías portuguesas viajan vacías. La crisis las ha convertido a todas de peaje: en algunos casos peaje clásico, en otros peaje electrónico que te van cargando sin que te des ni cuenta. El resultado son miles de quilómetros fantasmas por los que circula muy poca gente. Hasta llegar al sur calculo que nos habremos dejado unos 120 euros en peajes. No sé cuál habrá sido el impacto de la medida en términos de seguridad vial (imagino que se habrán incrementado los accidentes al huir todo el mundo de este tipo de vías), pero el viajero se asombra antes de desviarse en Aveiro y hacer noche en una de las más hermosas ciudades de la  Costa de la Plata. Una costa donde perderse entre reflejos al atardecer. La eternidad, dice Magalhaes en su discutido y discutible libro, es una fatalidad portuguesa...

1 comentario:

Drizzt dijo...

Lo peor no es eso, lo peor es el estado de las carreteras que no están de peajes. A veces, suelo coger la A22. la autovía del Algarve, si estando en mi pueblo, me da un día por ir a San Vicente. Una hora y media. Por la costa, la N125, casi tres horas, por no hablar de como está esa carretera, ni de lo accidentada que puede llegar a ser.