15.8.18

Lo malo, y lo rápido

Cómo se expande lo malo, con qué velocidad. 


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo partiría de dos ideas. La antiquísima "el obrar sigue al ser". Dependiendo de lo que uno ES, así obrará. Uno que ES mentiroso normalmente mentirá.

Por otro lado, la tecnología es poder, lo que realmente hace es amplificar y propagar lo que somos. Son medios para expresar lo que uno ES.

Entonces, pregunto: ¿cómo somos en nuestra época: veraces o cínicos, sinceros o mentirosos...? ¿Cómo se soluciona el problema: actuando sobre la tecnología o más bien sobre las personas que la usan para expresar lo que SON?

Anónimo dijo...

De las cinco primeras preguntas me quedo con la última, pues es el núcleo de todo.

La auténtica crisis es sobre la verdad. Nadie decide qué es lo verdadero. Ése es nuestro problema: seguir creyendo que nosotros creamos o producimos la verdad. Y ahí llevamos empantanados al menos cinco siglos: pasando el péndulo del racionalismo idealista al emotivismo (ambos subjetivistas), y a la inversa.