13.4.19

Mitos

Espectacular el artículo de Jorge Palacio el otro día en el mundo, a vueltas con el mito y el logos. Y esta párrafo tan oportuno del gran Luis Arranz: "El profesor Luis Arranz explica con maestría en su balance del reinado de Alfonso XIII para la Real Academia de la Historia las consecuencias de un regeneracionismo «siempre truculento, moralista y utópico» que contribuyó a la deslegitimación del sistema mientras vivía al margen de las grandes teorizaciones que corrían en Europa sobre la política de partidos de la mano de Ostrogorski, Michels o Weber"


La conferencia a loa que hace referencia, aquí:




1 comentario:

Mandín dijo...

Es justo lo contrario de lo que dice. La causa profunda del conflicto permanente en las sociedades modernas es su adherencia al "mito", no al logos, al voluntarismo y emotivismo, no a la racionalidad. Es decir, la dimisión de la razón moderna para fundamentar objetiva y racionalmente la política y la moral.

Destruido el orden anterior, la Ilustración fracasó en el intento de fundamentar racionalmente "su" visión política y moral, y la posmodernidad es el aborto de ese fracaso, cayendo en la arbitrariedad de la voluntad y el poder. Y por ello se inventaron artefactos sustitutivos de la moral y política antiguas, como por ejemplo los derechos humanos.

Pero los derechos son artefactos, mitos, ficciones, como los unicornios. Tanto la declaración francesa de 1789 como la de la ONU, se guardan muy mucho de no dar fundamentos objetivos y racionales para aseverar su existencia. Por tanto, son las cambiantes expresiones emotivistas de la época, la moda o lo políticamente correcto. Hoy puede ser derecho una cosa, y mañana perfectamente lo contrario, como estamos viendo continuamente. Se "creen" en ellos, como en las brujas, y ya está. Pero debajo no hay nada. Son meras creencias irracionales, a-lógicas, sin logos.o

Recomiendo al respecto leer Tras la virtud, de A. Macintyre.