15.1.21

Relatores

Habrá que hacer algún día un relato administrativo de la pandemia. Del papel del ministerio de sanidad, en concreto. Un ministerio maría, devaluado, sin personal para enfrentarse a todo esto. Y luego las palabras, que generan la realidad y todo lo contaminan: "Sanidad notifica 38.869 contagios", "Notifica", como si en el ministerio fueran simplemente notarios de lo que pasa. "Vienen días duros por la relajación de Navidad" señala Don Simón, como si la cosa no fuera con ellos; como si se limitaran a dar el parte de una realidad ajena y lejana. Como se quejaba Marx de los filósofos, relatan lo que pasa porque renunciaron a intervenir para cambiar la realidad. 

Así de postmoderno. Así de real. Así de duro. 

1 comentario:

Anónimo dijo...

No a la última frase. Precisamente el núcleo de la (post)modernidad es poner en dialéctica realidad-intelecto humano. Se parte de meras ideas, desechando la realidad y ésta deviene plastilina.

Pero en épocas más lúcidas no había dialéctica, sino sinergia.