21.6.07

Lecturas

Acabado Estado de miedo, de Michael Crichton. Entiendo porqué se venden tanto y tan bien los bestselers. Se leen de un tirón. Los personajes son bastante planos y no plantean demasiados problemas al lector. Si además la historia está bien contada, miel sobre hojuelas. Algo así le ocurre a este libro. En realidad intenta ir un poco más allá de la pura novela, ya que las citas a pie de página que completan la trama son reales. El autor quiere denunciar cómo el ecologismo militante se ha convertido en un nuevo fundamentalismo que lanza jeremiadas sin límite, pruebas ni rubor. Mi conclusión: el tema es interesante pero literariamente el libro es flojo. Ustedes mismos.

Empiezo Ciudades en marcha, del británico Arnold Toynbee. Algún día les hablaré de mi relación con el erudito Toynbee. En este libro reflexiona sobre el papel que las ciudades han jugado en la historia y prevé la llegada de lo que denomina “ecumenópolis”. Algunas reflexiones suyas sobre la función de las murallas en las ciudades, o sobre el papel de las ciudades estado son francamente interesantes. Su definición de ciudad es, junto con la de Ortega, de lo mejor que conozco. Ya les iré contando.

PS: un ejemplo de claridad y de lealtad: el peneuve guipuzcoano en los meses previos al golpe militar de 1936. En una reunión con los carlistas, la ceda y la falange Telesforo Monzón, dirigente del peneuve que acabaría en Herri Batasuna “muestra su posición favorable a sumarse a un movimiento para frenar una posible revolución comunista”.

PD: Una iniciativa sensata dentro de un país de locos (tomado de la bitácora de Luis I. Gómez).

3 comentarios:

Butzer dijo...

Hay que ver, si es que Carrillo las armaba en sus tiempos mozos...jejeje. Estos del PNV son lo más. Ahora han cambiado a la Falange y al CEDA por Aralar y Batasuna.

Admin dijo...

Yo, más bien, creo que no han cambiado en nada esto hijos de Arana.

Han estado siempre con quien garantizase sus fines, aunque con desgraciada frecuencia, los métodos para las mismos se acercaran a las armas hasta tal grado, que siempre las han tenido muy cerca. Demasiado cerca.

Cabo Quilates, Cárcel de los Ángeles Custodios, Altuna Mendi... estos señores estuvieron directa o indirectamente de la mayor matanza en Vascongadas durante la Guerra Civil. Y no precisamente me refiero a Guernica.

Aquí les dejo una dirección en la que se habló -hace un tiempo- de estos sucesos, por si les interesa:

http://batiburrillo.redliberal.com/009857.html

Saludos.

Anónimo dijo...
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