7.1.21

El Estado y tal

España para el tal Espinar, y para muchos de su generación. Esta izquierda sin patria, fascinada por las patrias carlistas de toda la izquierda periférica. No se pierda, caro lector, esta razonable reflexión de Juan Claudio de Ramón sobre España para la izquierda. Claro que España es una construcción artificial, como lo son todas las naciones, y claro que es una identidad antigua. El problema lo tenemos por una izquierda inconsistente en estos temas que "da en pensar España como un mera superestructura, un traje jurídico mal cortado para un número incierto de «pueblos» que, al contrario que España, serían realidades tan naturales y sólidas como el macizo de Montserrat o el monte Gorbea". 



1 comentario:

Anónimo dijo...

Hombre, eso de "construcción artificial" habría que matizarlo: no es lo mismo hacer una tuerca o un coche que una familia o una nación.

De todos modos, prefiero la "democracia extendida en el tiempo" chestertoniana. Simpatizo con aquellos que prefieren que la casa de sus bisabuelos siga siendo lo que ellos quisieron que fuera: un hogar que guardara la memoria y los recuerdos de una familia concreta. Pero destestaría que se malvendiera y pasara a ser un hotel, un banco o un ambulatorio de la seguridad social.