10.1.06

Coherencia

Vivir para ver. El futuro presidente de Bolivia, de esa izquierda sesentera que tanto gusta por aquí, ha proclamado, en su visita a la dictadura izquierdista China, que espera que los dictadores chinos consideren a su país: "un aliado ideológico". Es curioso. Luego dicen que somos nosotros. El líder del Movimiento al Socialismo pide ser considerado aliado ideológico del Partido Comunista Chino.
Aliado ideológico de un Estado en el que están prohibidos los sindicatos de clase.
En el que están prohibidas las manifestaciones obreras. En el que, hasta hace seis meses, los universitarios no podían casarse entre sí.
Buenos aliados, sí señor. Tras la visita a la prisión castrista, ahora se proclama amigo de los señores del Laogai. Y este es la gran esperanza para Bolivia...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hace poco preguntaron a Juan Antonio Samaranch que le parecía que la China organizara uno JJOO teniendo en cuenta el poco respeto que se tiene en derechos humos en aquel país, Samaranch respondió:
"¿Hay alguien que pueda decir que no tiene problemas con los derechos humanos?"
Para Samaranch, todos son iguales, no distingue la tenue linea que separa la dictadura china de las democracias occidentales.
No he oído críticas al señor Samaranch.

Anónimo dijo...

Según el alcalde de Salamnca la devolución de les papeles incautados después de la guerra civil por el ejército fascista es el mayor espolio cultural de la Europa occidental. Bravo!