Se me acumulan los ejemplares de La Lectura. Volviendo de la Galicia olvidada me pongo al día con varios. El número de principios de abril, dos reflexiones brillantes:
Solvej Balle y la literatura como herramienta para detener el tiempo: "La narrativa empieza cuando la conocemos, y termina cuando se acaba, es una maravillosa máquina de control del tiempo: puedes cerrar el libro y estas personas no van a moverse a ninguna parte hasta que lo abras de nuevo. Y ese control contrasta con el que nos ofrece la vida, porque nacemos en un mundo que ya está ahí y cuando morimos va a continuar después de nosotros. Por eso todas las culturas han tenido historias, mitos o religiones. y creo firmemente que empezamos a contar historias alrededor del fuego hace miles y miles de años tan pronto como fuimos capaces de imaginar, de pensar en el pasado y en el futuro..."
Por otro lado, Dicker y sus maravillosa defensa de la lectura en papel. Subrayado entero en el periódico. Las librerías que cierran, los cambios sociales.... y de fondo, esto: "Mediante la lectura diaria en papel, el ser humano desarrolla herramientas que tienen una función social primordial, como la empatía, la comprensión del otro, la comprensión de los retos de nuestro tiempo e incluso la capacidad de reconocer las noticias falsas. Leer no consiste tanto en acumular conocimientos como en desarrollar el cerebro, como un músculo, y entrenarlo en estas capacidades..."
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